Hidelfonsa Cruz Martínez, viviendo y haciendo los “mil y un usos del ambiente literario”

Existencias: ¿Cómo se te da el inmiscuirse en este ámbito cultural?

Hidelfonsa Cruz Martínez: Lo primero que debo confesar es que no fui lectora a temprana edad. Yo comencé a leer casi a los 30 años. ¿La razón? Tenía que vender libros. No digo que no hubiera leído nada antes. En mi adolescencia leí a “El Marqués de Sade”, por ejemplo, pero eso fue por puro morbo, y así otros textos, sólo lo que me interesara. Cuando empezamos con Editorial Edhalca mi reto era vender y vender y para ello tenía que saber qué decían los libros que tenemos. El resultado ha sido bueno por muchas cosas en las que gané y sigo ganando, tanto en oportunidades, como en aprendizaje, oportunidades de conocer gente y lugares que nunca había visto, aprendizajes de vida y laborales. La lectura me rescató de esa rutina del diario. Fíjate, ahora que lo pienso, considero que el haber conocido a Sergio Haro, mi esposo ahora y director de Editorial Edhalca, ha sido lo mejor que me ha pasado, porque la forma en que él quiere vivir su vida, está muy lejos de lo tradicional. Él fue el que me mostró que no se trata de vivir por vivir, sino que debes vivir con un fin, con un objetivo, y algo que puedo presumir es que yo ya tengo una meta. Sergio, ahorita como editor ha podido hacer un gran equipo, y las personas que estamos en Editorial Edhalca hacemos lo que mejor nos sale, los autores son buenos escribiendo, yo soy buena para vender libros y él es bueno para editarlos. Ya son 29 años de ser pareja, en este tiempo hemos consolidado una familia muy particular, en la que cada “loco tiene su tema”, nos amamos así como somos, no necesitamos explicarnos, y esto se refleja en la Editorial. Por ejemplo, cuando hay reuniones se realizan con gran pasión, el amor que nos tenemos como pareja es muy verdadero, yo creo que por eso, a pesar de los “encontronazos” que nos damos como socios, no nos afecta como pareja. Pero el que Sergio Haro me haya invitado a ser parte de Editorial Edhalca me dio la oportunidad de saber una faceta que no conocía de mí y que quizá ni siquiera me hubiera imaginado.

Existencias: ¿Cómo te has venido forjando en tus roles como una artista? ¿Cómo ha sido esa evolución de alguien como tú, que tiene tantas funciones a realizar, en lo personal y también, en lo institucional?

Hidelfonsa Cruz Martínez: Por mi cabeza nunca hubiera creído que tenía talento, si hay algo a lo que atribuyo este cambio y transformación en mi persona es haber encontrado a un compañero, amigo, amante, y por qué no decirlo, maestro. Sergio Haro, ha sido una oportunidad y una experiencia que me ha hecho reinventarme, ya que con el tiempo me nacieron las ganas de hacer una novela, un poemario, un libro de cuentos y hasta charlas y conferencias. He llegado a creer en mí con tal seguridad, y sin afán de presunción, que puedo plasmar letras que suenan bonito, pero esa es mi percepción. Es tan satisfactoria esta faceta que espero seguir en este camino que nos apasiona a los dos. En lo personal, siempre fui vendedora. He sido vendedora de desayunos en el jardín de niños en que estuvieron mis hijos, tacos, dulces en la puerta de mi casa, hasta ropa interior por catálogo, incluso hice pasarelas, y convenciones de cosméticos, vendí zapatos importados de León, Guanajuato y no sé qué infinidad de cosas más, pero en todas éstas, fueron temporadas cortas. La temporada más larga, en la que he durado más, ha sido vender libros, viajar a las ferias internacionales de literatura y conocer lugares nuevos, gente nueva. Creo que este ha sido mi mejor trabajo hasta el día de hoy.

Existencias: Tu proceso creativo, ¿te lo programas, lo induces, surge “solo” o sale a flote como un personaje más de tus escritos?

Hidelfonsa Cruz Martínez: Mi proceso creativo es observar a las personas, comenzando con las que están cerca de mí, y sí, las que ya no, como mi madre, a la que le debo mi carácter y fuerza. Me considero sensorial. Sé que cuando leo algo se me mueven las fibras emocionales. El trato con las personas me deja un gran ejemplo y abre una ventana por donde entra la luz, una idea que me lleva a escribir.

Antes pensaba que estar sola era algo muy malo, que no tenía gracia. Llegué a pensar que eso me podía lastimar, pero descubrí que eso me da paz y puedo escuchar mis pensamientos. Así es como quizá comienza el renglón de una historia o un poema.

Ahora necesito esos espacios de soledad para estar conmigo y escuchar a mis ideas, que son un montón y revolotean como mariposas de un lado a otro de mi cabeza.

Existencias: Me valgo de una acepción, que no está en diccionarios, quizás sea mía, en fin. Para mí “activista” es aquel que activa algo inactivo. En esa lógica, ¿te consideras “Activista”?

Hidelfonsa Cruz Martínez: Me considero un “huracán”. Sergio Haro planea, yo hago. A mí no me gusta esperar. Hay que hacer las cosas y cuidadito con invitarme a participar en algo y que no se haga. Me pongo en “modo Hulk”, no prometan lo que no va a hacer, eso hace que vea a las personas como falsas, de a mentiras, me caen mal, como diría nuestro presidente: “fuchi…”

Existencias: ¿Hay planes tuyos, en directo/personal, con la Editorial?

Hidelfonsa Cruz Martínez: A corto plazo, hacer talleres infantiles. Queremos generar nuevos lectores. También quiero hacer libretas culturales, para vender, y pintar. ¿Te dije que también soy pintora? Fíjate, vendedora, promotora cultural, escritora, poeta, actriz, gestora, gerente, coordinadora, no’mbre, ya se me hace que “Barbie” no me llega, ja, ja, ja, ja.

Mi plan a largo plazo será irme de este mundo en paz y con tranquilidad.

(André Michel).